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María en la Biblia

virgen maria 15

Hay quienes dicen que la presencia de María en las escrituras es limitada y no se corresponde con la tremenda atención que a María le dan los católicos. Justamente, estuve en una librería Evangélica Cristian el otro día y el libro más popular es “The prayer of Jabez” (La oración de de Iabés). Es un gran libro, el más vendido de los libros cristianos el año pasado. Toma sólo 2 versículos de la Escritura:

“Iabés fue el más célebre entre sus hermanos, y su madre le puso el nombre de Iabés diciendo: “Di a luz con dolor”. Iabés invocó al Dios de Israel, exclamando: “Si me bendices verdaderamente, ensancharás mis fronteras, tu mano estará conmigo y alejarás el mal para que desaparezca mi aflicción”. Y Dios le concedió lo que él había pedido”. (I Cr. 4,9-10)

Es una gran oración. Toda una industria surgió de estos dos versículos.

Teniendo esto en cuenta, veamos lo que ocurre con María. Tal vez podamos ver que no es el volumen de Escritura lo que importa sino su contenido y la importancia de éste en la historia de la Biblia.

Veamos donde aparece María. Ella está presente en casi todos los eventos más importantes de la vida de Jesús: su concepción (Lc.1,2), su desarrollo en el vientre, incluyendo el desarrollo fetal de Juan el Bautista (Lc. 1,43), su nacimiento (Lc. 2,7). su presentación y entrega a Dios (Lc. 2,22), su infancia (Lc.2,22-38). Su confirmación a los 12 años (Lc. 2,49), el comienzo de su ministerio público y el primero de sus milagros, que Ella misma promovió (Las Bodas de Caná, Jn. 2,3). Su muerte en el Calvario (Jn. 19,26) y el nacimiento de la Iglesia en Pentecostés (Hech. 1,14). ¿Cómo podemos decir que tiene un papel menor en la Biblia? Humildemente, quisiera sugerir que el rol de María en la Biblia es infinitamente más grande que el de Iabés quien ganó mucha más atención entre los evangélicos.

María es una cristiana “renacida” que recibió el Espíritu Santo en Pentecostés y habló en lenguas 2000 años antes que los Pentecostales recibieran este don (Hech.1,14-2,3). Ella sabe como orar (sí, incluso en lenguas)

Los católicos hacen una comparación muy interesante entre María, la Madre de Jesús y Eva en el Génesis. Eva está en el centro entre la raza humana y el pecado con la consiguiente Caída. Ella es en cierto sentido la “mediadora” del pecado original (Gen. 3,3-24). Los católicos creen que, el “sí” de María a Dios y su plan de redención opuesto a Eva, revirtió ese “no” de Eva y su rechazo a la obediencia y a cooperar con Dios. El sí de María y su cooperación con la Gracia, derrotó al “no” de Eva (Lc.1,2). Los católicos no creen que sea casual que Eva (la mujer) salga del cuerpo de Adán (el hombre) y que Jesús (el hombre-Dios) salga del cuerpo de María (la mujer). Este pensamiento fue pronunciado ya por San Justino (quien vivió en el 110-165 D.C.) y es consistente con la comparación hecha por San Pablo entre Jesús y Adán.

La Caída

La Redención

Dijo el Señor Dios, “No conviene que el hombre esté solo. Voy a hacerle una ayuda adecuada.” (Gen. 2,18) Yo soy la servidora del Señor,” respondió María. (Lc. 1,38)
El hombre exclamó: “¡Ésta sí que es hueso de mis huesos y carne de mi carne! Se llamará Mujer porque ha sido sacada del hombre. (Gen. 2, 23) Y Jesus le respondió, “Mujer, ¿Qué tenemos que ver nosotros? Mi hora no ha llegado todavía” (Jn. 2,4)

“mujer” es un título raro para su Madre,y es inusual para la época, los católicos piensan que habría una razón para que Jesus usara esa palabra.

Luego, con la costilla que había sacado del hombre, el Señor Dios formó una mujer y se la presentó al hombre (Gen. 2, 22) Pero cuando se cumplió el tiempo establecido, Dios envió a su Hijo, nacido de una mujer y sujeto a la Ley para redimir a los que estaban sometidos a la Ley y hacernos hijos adoptivos. (Gal. 4, 4-5)
La serpiente era el más astuto de todos los animales del campo que el Señor había hecho, y dijo a la mujer: “¿Así que Dios les ordenó que no comieran de ningún árbol del jardín?… (Gen. 3,1) Su madre dijo a los sirvientes: “Hagan todo lo que Él les diga” (Jn.2,5).

(En cierto modo Ella está reparando lo desobediencia de Eva)

Entonces el Señor dijo a la mujer: ¿Cómo hiciste semejante cosa?. La mujer respondió: “La serpiente me sedujo y comí”. (Gen. 3,13) María dijo entonces: “Yo soy la servidora del Señor, que se cumpla en mí lo que has dicho”. Y el Ángel se alejó. (Lc. 1,38)

María con su obediencia repara la desobediencia de Eva.

Adán dio a su mujer el nombre de Eva, por ser ella la madre de todos los vivientes.(Gen. 3, 20) Al ver a la Madre y cerca de ella al discípulo a quien Él amaba, Jesús le dijo: “Mujer aquí tienes a tu hijo”.                        Luego dijo al discípulo: “Aquí tienes a tu Madre”(Jn. 19,26-27)

Los católicos creen que a partir de aquel momento María fue dada como madre a todos los cristianos.                                     (Ver Ap.19,26, explicado más abajo)

Esta tabla es una adaptación de mi amigo John Pacheco www.Catholic-Legate.com

María fue una verdadera servidora. Ella fue a la casa de Isabel para ayudarla en las tareas domesticas en su tiempo de embarazo avanzado cuando esperaba el nacimiento de Juan. Puedo imaginarme a María lavando el baño de la casa de Isabel, limpiando los pisos y cocinando con Jesús, el salvador del mundo en su vientre. ¡Qué humildad, qué servidora! (Lc. 1,39)

Los católicos sienten que María puede hacer milagros en nombre de Jesús, aún mejores de los que cualquier pastor evangélico hace en el nombre de Jesús. (Mt. 10,1). En mi testimonio sobre María cuento como Jesús sanó mi trastorno de alimentación (anorexia-bulimia). Un día dije a María: “María tu alimentaste a tu bebé Jesús durante tantos años, te suplico que me alimentes”. Ese fue el momento decisivo en mi recuperación y no he vuelto a tener atracones de comida, vómitos ni ayunos excesivos durante 12 años. Ella es una efectiva guerrera de la oración

Hablando de alimentos, creo que esto de los alimentos es clave para entender Mc. 3,33-36, un pasaje que con frecuencia se usa como “prueba” contra la “particularidad” de María (pretendiendo que Ella no sea especial)

“¿Quiénes son mi madre y mis hermanos?” El preguntó. Luego miró a quienes estaban sentados a su alrededor y dijo: “¡Estos son mi madre y mis hermanos! El que hacen la voluntad de Dios ese es mi hermano, mi hermana y mi madre”.

Creo que encontraremos una respuesta para la preocupación de María por su Hijo, trece versículos antes de este pasaje. Ella vino hasta Jesús porque Él no estaba comiendo adecuadamente y esto es una preocupación para cualquier madre.

“Entonces Jesús entró en una casa, y nuevamente una multitud reunida, de modo que ni Él ni sus discípulos pudieron comer. Cuando su familia se enteró acerca de esto, fueron a hacerse cargo de Él porque decían: “Está fuera de sí” (Mc. 3,20)

Debemos recordar que María era humana, era una madre y estaba atravesando un verdadero peregrinar de fe (Lc. 2,19-51). Ella no lo sabía todo. Quería ver a su Hijo tener éxito en su ministerio y también separarlo un poco de la gente para alimentarlo. Mi mamá me decía que estaba loco cuando no comía, ¡Apuesto a que ustedes también me lo habrían dicho! Las madres son un poco raras a veces, siempre están preocupadas por que sus hijos coman lo suficiente, aún cuando los hijos hayamos crecido.

Parafraseando Mc. 3,34, pienso que Jesús estaba diciendo era, nada más que: “OK Ma, ya estoy grande, puedo alimentarme solito, no te preocupes. Soy un adulto, mi ministerio ya comenzó y la gente que hace la voluntad de Dios son mi madre y mis hermanos”. Así también, en este momento Él se estaba entregando a toda la humanidad; más que despreciar su familia, estaba invitando al mundo entero a unirse a ella. Me acuerdo cuando María me invitó a ser parte de la Sagrada Familia de Jesús.

Debemos notar que este pasaje se enreda un poquito. Por un lado Jesús rechaza aparentemente a María, pero cuando dice: “los que hacen la voluntad de Dios” se está refiriendo a ella. De hecho, nadie fuera de Jesús en toda la historia humana ha cumplido perfectamente la voluntad de Dios como lo hizo María. Ella dijo “Sí” para engendrar a Jesús (Lc. 1,38). Debemos recordar que Jesús siempre habla en diferentes niveles. En este pasaje habla en un plano material acerca de que no necesita comer pero también enseña en el plano espiritual cuando invita a toda la humanidad a unirse a su familia, a hacerse su “madre” y sus “hermanos”.

¿Quién en la historia del género humano ha sido más obediente a Dios que María? Ella fielmente dijo: “Aquí estoy Señor, esta es la servidora del Señor, hágase en mí según su voluntad” (Lc.1,38) sin saber cómo los demás podrían creerle ni cómo escaparía a la ley judía de linchamiento por adulterio. Ella estaba comprometida con José, el amor de su vida; y aún se arriesgó a perderlo, que estuvo a punto, para decir “sí” a Jesús (mat.1,19). Ella tenía en su vientre al Salvador, de manera que si ella hubiera sido apedreada hasta morir antes que Él naciera, Él también hubiera muerto y no habría esperanza de vida eterna para ninguno de nosotros. Su “sí” fue GIGANTESCO. María puso a Jesús por encima de José e incluso de su propia vida; aún antes que Jesús fuera concebido en la carne. Cuánto más ella habrá colocado a Jesús por encima de sí misma después de la resurrección.

Otros versículos frecuentemente usados para desprestigiar a María son:

“¡Bendito sea el vientre que te llevó y los pechos que te amamantaron! pero el contestó: Más benditos aquellos que escuchan la palabra de Dios y la practican”. (Lc. 11, 27-28)

Esto no es un desprestigio para el rol de María sino simplemente enfocarse en su obediencia más que en su función de madre. Está mostrando que el verdadero milagro en torno a la encarnación de Jesús por María fue su obediencia al Señor aún a riesgo de confrontar el divorcio de José y el linchamiento por “adulterio”. (Lc. 1,38).

Isabel, la madre de Juan el Bautista dice: ¿Quién soy yo para que la madre de mi Señor venga a visitarme? (Lc.1,43) Este pasaje nos da un título para María; ella es “la Madre de mi Señor”. Algunos evangélicos preguntan: ¿Por qué ustedes llaman a María la Madre de Dios? Es por que la Escritura lo dice y simplemente porque Jesús es Dios y ella fue su madre. Esto no la hace una diosa, simplemente la hace ser (“si, de hecho”) muy importante.

María delinea claramente su rol en la eternidad en Lc. 1,46-49

Mi alma glorifica al Señor
y mi espíritu se alegra en Dios mi salvador.
porque ha mirado la bajeza de su sierva;
desde ahora me llamarán bienaventurada todas las generaciones.

Como podemos ver, su rol es magnificar al Señor y alegrarse en Dios sus salvador. Ella debe ser humilde (que lo es). Nosotros hemos sido llamados también a hacer algo: llamarla bienaventurada. Y esto es para todas las generaciones, todos los pueblos y especialmente todos los cristianos no solamente un puñado de ancianitas católicas.

En el Calvario (Juan 19, 26),

Cuando Jesús vio allí a su madre y cerca de ella al discípulo que Él amaba, Jesús dijo a su madre: “Querida mujer he ahí a tu hijo” y al discípulo: “He ahí a tu madre” y desde aquel momento el discípulo la recibió en su casa.

Ciertamente que lo dijo, como algunos evangélicos sugieren, para que Juan cuidara de su madre. Pero hay que tener en cuenta que Jesús jamás hablaba solamente en un nivel, sus palabras son “multi-capa” (con distintos niveles de significado) y muy ricas. Creo que en este pasaje, el significado más grande es que Jesús da a todos y cada uno a María como madre nuestra. Sentí esto la primera vez que lo leí (antes de escuchar a los teólogos católicos).

En este punto su peregrinaje de fe estaba madurando. Cuando Jesús era más joven lo corrigió cuando se fue con los doce (Lc.2,51) y a sus treinta años de edad cuando no se alimentaba adecuadamente (Mc.3,34). Ahora ella comprendía y aceptaba la profecía de Simeón (Lc.2,34-35). Ella mantuvo su fe, permaneció obediente a los pies de la cruz (Jn.19,26). Más tarde recibiría la recompensa (Hech.1,14) y ahora, en el cielo, comparte la grandeza de esa recompensa con nosotros, su fe en Jesús, Rey de reyes y Señor de señores.

Los católicos ven a María como el Arca de la Nueva Alianza

El Arca llevaba la Palabra de Dios, María llevó en su ser a la Palabra de Dios hecha carne. El Arca de la Alianza desapareció por primera vez en I Sam.4,11 cuando los filisteos tomaron Israel pero fue devuelta a los israelitas porque se tornó en maldición para aquellos que no creían en un único y verdadero Dios (1 Sam 6,4). Esto nos habla de que el Arca tenía una propensión a ser devuelta después de ser capturada. Volvió a desaparecer durante la opresión babilónica alrededor del año 600 A.C. y nunca más ha vuelto a ser vista, hasta hoy día.

Los católicos creen que retornó tal como ocurrió la primera vez. Originalmente, el Arca de la Alianza contenía la Palabra de Dios inscripta en la piedra por las propias manos de Dios. el Arca no era la Palabra en sí misma pero por eso no era menos importante. María trajo a la “Palabra hecha carne” dentro de ella en el mismo modo en que el Arca de la Alianza llevaba los 10 mandamientos a través de los cuales la Palabra de Dios se manifestaba en el mundo real (Jn.1,1). El Arca reaparece en Apocalipsis 11,19. Es presentada como María, la Madre de Jesús.

“En ese momento se abrió el Templo de Dios que está en el cielo y quedó a la vista el Arca de su Alianza, y hubo rayos, voces, truenos y un temblor de tierra, y cayó una fuerte granizada. Y apareció en el cielo un gran signo: una Mujer revestida de sol, con la luna bajo sus pies y una corona de doce estrellas en su cabeza. Estaba embarazada y gritaba de dolor porque iba a dar a luz (…) El dragón se puso delante de la mujer que iba a dar a luz , para devorar a su hijo en cuanto naciera. La Mujer tuvo un hijo varón que debía regir a todas las naciones con cetro de hierro. Pero el hijo fue elevado hasta Dios y hasta su trono (…) El dragón al verse precipitado sobre la tierra se lanzó en persecución de la mujer que había dado a luz al hijo varón. Pero la Mujer recibió las alas de la gran águila para volar hasta su refugio en el desierto (…) lejos de la serpiente. (…) El dragón enfurecido contra la Mujer, se fue a luchar contra el resto de su descendencia, contra los que obedecen los mandamientos de Dios y poseen el testimonio de Jesús.

Algunos evangélicos sostienen que la mujer coronada con las estrellas de este pasaje es Israel y que las 12 estrellas representan a las 12 tribus de Israel. Ellos dicen que la mujer no es María. El problema con esta interpretación dice claramente que sus hijos son quienes “poseen el testimonio de Jesús” (Ap.12,17), algo que los hijos de Israel de hecho no “poseen” y que, sin embargo, los hijos de María poseen con toda seguridad. Los católicos creen que esto comienza con Juan al pie de la cruz cuando Jesús le presentó a María como madre (Jn.19,26).

Los católicos creen que este pasaje del Apocalipsis clarifica varios puntos importantes:

  1. El Arca de la Alianza ha sido devuelta al Templo
  2. El templo ahora es el cielo (Ver también: Heb. 9,1-12)
  3. Una mujer coronada está allí (La nueva arca)
  4. Ella dio a luz un hijo que reinará sobre todas las naciones y está en el trono de Dios
  5. El demonio está muy interesado en destruirla pero Ella está segura
  6. Sus hijos son todos los fieles cristianos.

Comparemos ahora el Arca de la Antigua Alianza con María, de quien los católicos creen es la Nueva Arca.

El Arca del Antiguo Testamento

María – Nuevo Testamento- 
El Arca de la Nueva Alianza

La Palabra fue escrita por Dios en tablas de piedra (Ex. 25,10) La Palabra se hizo Carne (Jn.1)
El Arca llevaba la Palabra de Dios(Deut.10,1). El Arca llevaba la Antigua Alianza María llevó la Palabra de Dios (Lc. 1, 38) María llevaba en su cuerpo la Nueva Alianza
David dice: ¿Quién soy yo para que el Arca de mi Señor venga a mi? (II Sam 6,9) Isabel dice: ¿Quién soy yo para que la madre de mi Señor venga a visitarme? (Lc. 1, 43) (María , estaba embarazada de Jesús)
Cuando el Arca volvió “David saltaba y danzaba ante el Señor” (II Sam 6,14) El niño saltó de alegría en el seno de Isabel cuando María entró en su presencia llevando a Jesús en su seno. (Lc. 1, 38)
“Y allí he puesto el Arca donde se encuentra la Alianza que el Señor concluyó con los israelitas”. (II Cron. 6,11) El esposo de Isabel dijo: “Él ha recordado su Santa Alianza (Lc.1,22)… “Esta copa es la Nueva Alianza sellada con mi Sangre” (Lc.22,20)
Josué convocó doce hombres de entre los israelitas, uno por cada tribu. Josué les dijo: “Pasen delante del Arca del Señor su Dios” (Jos.4,4) Había 12 piedras, como las 12 estrellas de Ap.11,19 El Arca de su alianza quedó a la vista dentro del templo (…) (Ap.12,1) Apareció un gran signo en el cielo: una mujer…y sobre su cabeza una corona de doce estrellas (Ap. 11,19) representando a las tribus de Israel.
El arca del Señor es una bendición para la casa (II Sam 6,11) María cruzó las montañas y llegó a bendecir la casa de Isabel (Lc. 1,39ss)
El Arca es capturada (I Sam 4,11) y llevada a una tierra extranjera para luego retornar (I Sam 6,13) María se exilia en Egipto y luego retorna
El Arca desaparece  (Jer 3,16) y nunca vuelve a aparecer hasta la historia contada en el Apocalipsis ya en el Nuevo Testamento. El Arca reaparece como una mujer que da a luz un Hijo quien se sienta a la derecha de Dios. Sus demás hijos son los cristianos. (Ap. 11,19)
No será como la Alianza que establecí con sus padres (…) que ellos rompieron aunque yo era su esposo (Jer 31:32) El Espíritu Santo te cubrirá con su sombra; un hijo te nacerá (..) será llamado Hijo de Dios(Lc 1,35) (El Espíritu Santo fue el esposo de María)

Los católicos creen que su relación María es verdaderamente bíblica; siente que sería anti-bíblico ignorar su lugar en las Escrituras. Muchos evangélicos dicen que el ministerio y el propósito de María finalizó con el nacimiento de Cristo. Si fuera así cuál sería la razón para que el demonio esté tan interesado en destruirla después del nacimiento de Jesús. Los católicos creen que el pasaje identifica a María como el Arca de la Alianza redescubierta. Ahora el Arca está en el cielo, ha sido hallada, es María. El pasaje del Apocalipsis describe a la mujer en el cielo coronada con 12 estrellas como la madre de Jesús (no como una diosa pagana). Se la presenta como una pieza verdaderamente importante no solamente por haber dado a luz al Salvador sino también porque en servicio a Él continua jugando un papel importante, en la continua batalla espiritual contra Satanás y sus ángeles caídos. Este pasaje dice también que todos los que poseen el testimonio de Jesús son sus hijos. Esto incluye a los cristianos de todas las denominaciones. Todos son sus hijos. Esta es la razón por la que los católicos no piensan que sea bueno dejar de lado a María en pos de la unidad de los cristianos. María es demasiado importante. Los católicos no abandonarán a María tanto o más que los antiguos hebreos no abandonaron el Arca de la Alianza.

María tiene un lugar muy especial en esta guerra espiritual. Ella no es una “persona muerta” que desapareció de las páginas de la historia. Ella es una guerrera de la oración que está viva y es muy efectiva. Los católicos no creen que su ministerio haya terminado con el nacimiento de Jesús, ese fue solamente el comienzo de su actuación.

Si bien el pasaje muestra a María coronada no hace de ella un dios. Ella es una creatura. El pasaje muestra claramente que Jesús es quien llega al “Trono de Dios”, Él es el Rey. ¿Qué rey respetable no tiene una reina? Y cuando hay un rey, la reina es una simple colaboradora de ese rey. Ella no tiene autoridad en sí misma salvo lo que pueda susurrarle al oído. Toda su dignidad proviene de Jesús, el Rey, su Hijo. Los católicos no tienen problema en rendirle honor y pedirle su oración a Jesús por nosotros.

Una invitación -ora a Jesús acerca de María-

Espero no haber causado animosidades con este artículo. Solamente, deseo ayudar a construir un puente entre católicos y protestantes. No creo que evitar a María ayude en esta empresa de construir un puente. No puedo ver este punto fuera de discusión, al menos en mi propia vida como en la de millones de cristianos que vivimos en el espíritu de Cristo y hemos sido enriquecidos por la relación con María. El tiempo dedicado a María no nos separa de Jesús tal y como no nos separa de Jesús el tiempo que dediquemos a otros cristianos.

Quisera concluir con una invitación que podría ser muy difícil y tal vez imposible para algunos. Quisiera pedirte que olvides todo lo que has oído acerca de María, todo lo que leíste acerca de ella incluyendo lo que he dicho aquí.

Quiero invitarte a que ores a Jesús. La mayoría de los cristianos aceptarán que totalmente seguro orar Jesús acerca de lo que fuera. Quiero invitarte a que ores a Jesús acerca de María. Simplemente pide a Jesús que te muestre la verdad acerca de su madre. Pídele que dirija tus pensamientos sobre ella. Pregunta a Jesús si su madre está viva con Él. Pregúntale si María está orando por nosotros. Simplemente ora a Jesús respecto de ella. Inténtalo cada noche durante seis semanas. Estoy seguro que Él te conducirá a la verdad acerca de su madre.

Pasajes Bíblicos que los Católicos relacionan con María

  • Genesis 3,15; 24,43-46 – Rebecca, 28,12 – La escalera de Jacob 28,12
  • Éxodo 3,11-12; 13,2; 13,14 (Magnificat), 15,20; 21, 26 (Magnificat), 25,8 Arca 34,19-20
  • Levítico 12,2; 8 Purificación
  • Números 18,15 Presentación
  • Jueces 6,12; 15 Anunciación
  • I Samuel 2,1-10 (Magnificat)
  • Isaías 7,14 (Nacimiento de una Virgen)
  • Ezequiel 44,2 (Virginidad perpetua de Maria)
  • Mateo 1,16; 18-25 (Maria con su Niño: 2,11, 13-14, 20-23 Huida hacia Egipto 12,46-50 ¿Quién es mi madre? 13, 55 ¿No es acaso Maria su madre?
  • Marcos 3,31-35 Su madre estaba afuera 6:3 ¿No es el hijo de Maria?
  • Lucas 1,26-56 Anunciación, visitación y magnificat 2,5-7; 16-19; 22; 33-35; 39; 41-51 Natividad, los pastores, la presentación, el hallazgo en el templo 8,19-21. Tu madre esta afuera 11,27-28 Bendito el vientre que te llevo…
  • Juan 1,14 encarnacion 2,1-5 Cana 6,42 Conocemos a su madre 19,25-27
  • Hechos 1,14 Reunidos en oracion con Maria – Galatas 4,4 Dios envio a su Hijo nacido de mujer
  • Colosenses 1,15; 18 primogenito, Cabeza del Cuerpo
  • Apocalipsis 11,19 Arca en el cielo 12,1-17 La Mujer revestida de sol.

Autor: David McDonald

Fuente:Davidmacd.com

 

 

©2002 David MacDonald

Traducción al español: Margot Zunino

Señor Jesús te pedimos por la unidad de los cristianos
que se haga realidad a Tu modo
tenemos absoluta confianza
en que puedes reunir a tu pueblo.

Te damos absoluto permiso para obrar
Amen

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En el idioma popular significa: “La Iluminadora”. (S. Jeronimo M 1.23.780). En el idioma arameo significa: “Señora” o “Princesa” (Bover). El significado científico de María en el idioma hebreo es: “Hermosa” (Banderhewer).